El mundo occidental, o parte de él, presenta polarizaciones políticas, que son vistas como gestos de debilidad desde el extranjero, y ni hablar por parte de sus adversarios. Mientras la China de Xi, y la Rusia de Putin no tienen grandes problemas internos, las tensiones políticas en la Unión Europea en relación al sector agrícola, y el panorama político de Estados Unidos crean un clima tenso.
La primera potencia militar y económica del mundo, presenta un escenario de incertidumbre, y una muestra de inestabilidad política, y por supuesto esa inestabilidad crea un clima de debilidad. Hace horas el expresidente estadounidense Donald Trump, en un acto de campaña en Conway, Carolina del Sur, dejó en claro de que no respetaría el artículo quinto de la OTAN, mencionando que no protegería a los aliados de la OTAN en el caso de que Rusia los ataque, y es más, mencionó que animaría a Rusia hacer lo que se le dé la gana, y que deben pagar sus deudas. Este tipo de declaraciones podrían ser interesantes para el Kremlin, porque a Putin le sería muy útil tener una OTAN debilitada o fragmentada, ya que según él, dicha alianza es su principal amenaza a su seguridad nacional, mencionando esto en varias oportunidades, y en reiteradas entrevistas.
Por el otro lado, y más precisamente el lado demócrata, muestra a un Joe Biden confundiéndose los nombres de los mandatarios, señalando a personas en lugares que no están, y evidenciando problemas de memoria. No considero que él sea una mala persona, me parece bastante auténtico, el problema es que sus pérdidas de memoria en actos públicos generan una sensación de vacío de poder. Según el informe de un fiscal, menciona al presidente Biden como un agradable persona mayor con buenas intenciones, pero con mala memoria. Desconozco si lo que dice el fiscal mencionado es cierto o no, lo que sí está claro es que en actos públicos, el presidente Biden evidencia esta falta de memoria.
Por otro lado, desconozco si lo que menciona el populista de derecha de Donald Trump, lo dice porque lo piensa, o simplemente para quedar bien con un público aislacionista, lo que sí está claro, es que desde el extranjero la pérdida de memoria en público de Biden, y las declaraciones aislacionistas de Trump, generan una sensación de debilidad política occidental, ante la ausencia de líderes fuertes en la actualidad, como lo fueron Truman o Franklin Delano Roosevelt, aún con aciertos y errores. Si bien, según el exfuncionario George Elsey en un documental sobre Truman, decía que FDR tenía un perfil más procrastinador en asuntos internacionales, diferente del perfil de Truman, un poco más rápido y resolutivo, de resolver un asunto y luego pasar al siguiente, está claro que fueron dos líderes fuertes en política local y exterior. Actualmente el partido republicano tiene un perfil más reaccionario, distinto el perfil que tenía con T. Roosevelt o con Lincoln, y el partido demócrata presenta un perfil más socialdemócrata, pero con sectores más radicalizados. El único candidato moderado, que es competitivo electoralmente, y que tiene cierto carisma y con un perfil más centrista, muestra problemas de memoria. Considero que deberán trabajar mucho ambos partidos para salir de los extremos, y generar un clima de convivencia democrática, y de tolerancia, que le permita a sus ciudadanos una mejor calidad democrática. Independientemente de estos esfuerzos necesarios, el intento de insurrección del triste 6 de enero de 2021, fue un quiebre, en lo que desde el extranjero creíamos que era la democracia americana, porque lo que se ve desde afuera, es una sociedad con dualidades, que a veces representa una oportunidad de progreso para migrantes, pero por otro lado, una sociedad armada y con altos grados de polarización política.
Autor: Emmanuel Ruarte
14/02/2024